martes, 25 de marzo de 2008

Fantasmas del invierno


Corre el año 1947 en Ordial, la capital de la provincia imaginaria que Luis Mateo Díez ha ido delimitando a lo largo de sus novelas. Pasan lentos los meses del invierno de este año de la posguerra cubiertos de nieve y de hambre que obliga a los lobos del monte a olvidar su miedo a lo humano y acercarse a la ciudad en busca de algún sustento. El frío, el hambre y el miedo servirían por sí mismos para definir los inviernos de la posguerra, cuando la nieve de Ordial cala el cuerpo y el alma.
En el orfanato "El Desamparo" en el centro de Ordial aparece asesinado Melindo Medroso uno de los niños internos y el comisario Alicio Moro inicia sus pesquisas mientras se recrudece el invierno y los lobos se mezclan con las personas en las noches de la ciudad, ya que buena parte de la novela se desarrolla en la oscuridad fría en el que deambulan insomnes y ateridos, antiguos héroes de la legión Cóndor, topos escondidos que salen a las calles con el miedo a ser descubiertos, personajes del hampa, inspectores que trabajan desafiando a la nieve, y para colmo el diablo que aparece en Ordial tras ser entrevistado en una radio clandestina. Pero en Ordial "la consigna es el silencio".

Luis Mateo Díez, Fantasmas del invierno, Alfaguara, Madrid, 2004

sábado, 15 de marzo de 2008

Guerra y Paz en el siglo XXI


El Siglo XX fue el siglo de las grandes guerras, los estados convocaron a millones de hombres y los llevaron a morir a los frentes de batalla donde se produjeron masacres sin precedentes en la historia de la humanidad. Fue también el siglo donde se dió lo que se ha denominado guerra total, donde toda una nación se ponía al servicio de las necesidades de la guerra, y la población civil pasaba a ser a diferencia de las guerras decimonónicas un objetivo más de los contendientes, había que minar la moral del enemigo y el enemigo era el conjunto de los habitantes del pais. Fue también el siglo de la conocida como guerra fría, un estado de conflicto latente entre las dos superpotencias y sus satélites con la bomba atómica y la destrucción asegurada como telón de fondo. Así por el miedo que mutuamente se profesaban ambas superpotencias prefirieron dirimir sus diferencias a través de conflictos regionales más controlados a lo largo sobretodo de Asia y África. Eric Hobsbawm, uno de los más reconocidos historiadores británicos, comienza en este libro haciendo un balance de la guerra y la paz en el Siglo XX, para adentrarse después en las características que estos dos conceptos van adquiriendo en los inicios del nuevo milenio. Plantea como las guerras entre estados, sin desaparecer del todo, van dejando lugar a otros tipos de guerras, como la llamada guerra contra el terrorismo. Hace balance también del nuevo orden mundial, de como desde la caída del comunismo soviético y el afianzamiento de Estados Unidos como única superpotencia mundial, el mundo se ha convertido en un lugar menos seguro y más imprevisible. No pierde Hobsbawm en este libro la oportunidad de tratar las mutaciones que se están dando en temas como el nuevo imperialismo norteamericano, los nacionalismos que en los ultimos años han cambiado por completo el mapa de Europa, y siguen siendo una cuestión preocupante tanto en estados jóvenes, como en otros antiguos y muy consolidados. También hayamos una preocupación por la perspectiva y el futuro de la democracia, y la idea de que es inútil extender la democracia a través de la guerra. Es este un libro muy recomendable para todos aquellos interesados por conocer el mundo en que viven, para percibir los cambios, no todos ellos positivos de esta época que conocemos como era global.
La edición española está editada en la editorial Crítica.